Ley de consentimiento implícito: qué significa

Si usted cuenta con una licencia de manejo emitida en Estados Unidos, usted ya otorgó lo que se conoce como “consentimiento implícito”. Esto quiere decir que si un oficial de policía le detiene por sospechar que conduce bajo la influencia de sustancias (DUI) y le solicita hacerse una prueba para medir sus niveles de concentración de alcohol en sangre (BAC, por sus siglas en inglés), usted debe aceptarlo o enfrentará una sanción.

En resumen, el consentimiento implícito es el permiso automático que otorgan los conductores a los oficiales de la ley para ser sometidos a exámenes que midan sus niveles de BAC si los detienen bajo sospecha de DUI.

Este permiso es una condición necesaria para obtener la licencia de conducir y cada estado tiene algún tipo de estatuto sobre consentimiento implícito. ¿Qué más establece la ley? ¿Qué pasa si se niega a una prueba? Le contamos a continuación.

Diferencia entre consentimiento implícito y expreso

En términos legales, el consentimiento expreso es aquel que se otorga de forma clara y manifiesta, generalmente por escrito, y con claro conocimiento de lo que está aceptando y sus consecuencias. El ejemplo más típico son los formularios médicos que deben firmarse antes de una intervención quirúrgica.

El consentimiento tácito o implícito, por su parte, se establece bajo circunstancias o contextos específicos y su validez legal está sujeta a normativas legales que pueden variar según la jurisdicción, como el caso de las licencias de conducir.

Por ejemplo, usted quiere ir a un partido de fútbol en un estadio y para ingresar debe ser requisado por un funcionario de seguridad. Al llegar al punto de control, dejar sus pertenencias a un lado y levantar las manos para pasar, usted dio un consentimiento implícito para que le registren si es necesario.

Con su licencia de conducir ocurre algo similar, pero apoyado además por un marco legal. Las leyes dicen que si usted quiere tener una licencia para conducir, acepta implícitamente hacerse pruebas de sobriedad si así se lo solicitan.

Lo que dice la ley

Según las leyes de “consentimiento implícito” establecidas en todos los estados, cuando una persona solicita una licencia para conducir un vehículo motorizado, da su autorización para que le realicen pruebas de sobriedad y pruebas químicas para determinar qué tan intoxicado se encuentra.

Si un conductor se niega a someterse a la prueba cuando un agente policial tiene sospechas razonables de que está bajo los efectos del alcohol, enfrentará consecuencias como la suspensión automática de su licencia, entre otras. Esto va a depender del caso y las leyes del estado donde se cometa la falta.

Las repercusiones de negarse al alcoholímetro varían según las leyes locales, pero en la mayoría de los estados, se impone una suspensión automática de la licencia de conducir de 6 a 12 meses al rechazar una prueba para determinar el nivel de alcohol en sangre.

No obstante, y a pesar de las consecuencias, usted tiene el derecho a negarse a estas pruebas. ¿En qué casos es recomendable?

Rechazar la prueba de BAC

A pesar del consentimiento implícito, usted puede negarse a la prueba del alcoholímetro, pero ya sabe que tendrá consecuencias.

Más del 20 por ciento de los sospechosos de conducir borrachos en EE.UU. se niegan a las pruebas, según la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés). Esto cambia según el estado.

Por ejemplo, en Delaware solo el 2,4% de los conductores rechaza la prueba de BAC. En New Hampshire, al contrario, el 81 por ciento de los automovilistas se rehúsa aunque su licencia pueda ser suspendida. ¿Por qué lo hacen?

Negarse a la prueba de alcoholemia puede ser una estrategia de defensa, pero va a depender de las circunstancias que rodean el caso en particular. Muchos abogados consideran que rehusarse solo es ventajoso cuando la persona ya tiene una condena por DUI reciente en sus registros.

Recuerde que la sanción administrativa y castigos por rehusarse varían según las leyes de DUI locales. Un abogado con experiencia en casos de DUI puede ayudarle a determinar esto.

Tenga en cuenta que negarse no le garantiza evadir una condena por DUI. Al contrario: el rechazo puede ser usado por el fiscal como evidencia para probar su culpa.

Sanciones por rehusarse a hacerse los exámenes

Si aún no ha sido arrestado, los abogados de DUI generalmente tienen más argumentos para defender a sus clientes en ausencia de los resultados de la pruebas de campo o del alcoholímetro. Sin embargo, el acto de negarse conlleva sanciones que incluyen la pérdida de los privilegios para conducir debido a la suspensión de la licencia.

La severidad de las sanciones depende de los estatutos locales y los antecedentes del conductor, pero pueden contemplar desde suspensión de la licencia por al menos seis meses hasta multas de varios cientos de dólares.

En California, por ejemplo, los conductores reciben una citación por rechazar una prueba de BAC, pero dar su consentimiento para una prueba de sangre después de negar inicialmente el alcoholímetro borrará esa citación.

En Florida, si se rehúsa por primera vez tendrá una suspensión de la licencia de conducir por un año. Segundas o sucesivas negativas se consideran un delito menor de primer grado con suspensión por 18 meses.

Las suspensiones generalmente aumentan para un conductor con condenas previas por DUI. En muchos estados, si el conductor es declarado culpable de DUI, el hecho de haber rechazado el alcoholímetro puede acarrear sanciones más graves.

¿Es constitucional que se presenten cargos por negarse a las pruebas?

En 2016, la Corte Suprema de los EE. UU. dictaminó en el caso “Birchfield v. North Dakota” que rehusarse a un análisis de sangre después de ser arrestado por DUI no puede considerarse un delito aparte. La corte dictaminó que tal imposición sería una violación de la protección que otorga la Cuarta Enmienda contra registros e incautaciones irracionales.

Sin embargo, la corte diferenció las pruebas de sangre de las pruebas de aliento en su análisis. Se requiere una orden para solicitar una muestra de sangre debido a la naturaleza invasiva de la aguja, que penetra por la piel, y a que el suministro de sangre que la persona tiene disponible es limitado.

Un abogado puede asesorarlo

Las posibles sanciones por conducir bajo la influencia de sustancias pueden incluir tiempo en prisión y altas sumas de dinero en multas. Además, una condena por DUI le puede traer otras consecuencias en su vida. Desde pólizas de seguro más caras o suspendidas hasta un antecedente penal que le afecte para conseguir trabajo.

Si enfrenta un cargo por DUI, considere buscar asistencia de un abogado de DUI para desarrollar una estrategia.

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