Cuando los trabajadores se quedan sin empleo, pueden solicitar recibir prestaciones de un fondo de seguro de desempleo hasta que encuentren otro. Todos los empleadores deben pagar un seguro de desempleo por cada empleado de su organización, pagos que luego se depositan en el fondo estatal.
Los antiguos empleados pueden recibir un seguro de desempleo únicamente si perdieron su trabajo debido a un motivo ajeno a ellos. La desvinculación voluntaria o el despido por conducta inadecuada dificulta la tarea del empleado de solicitar prestaciones y los empleadores tienen el derecho a cuestionar los reclamos por desempleo cuando consideren que no son válidos. Este artículo brinda una descripción general del seguro de desempleo.
Si un empleado renuncia, solo será elegible para recibir los beneficios de desempleo si la renuncia se presentó por un motivo válido que, de alguna manera, fue responsabilidad del empleador. Para ser elegible para recibir las prestaciones de desempleo, debe probarse que el trabajador podría haber sufrido algún tipo de daño o lesión si permanecía en el empleo. La medida de escrutinio es si una persona razonable en la misma situación laboral hubiera permanecido en el empleo.
Para que el motivo de renuncia del empleado sea válido, debe ser apremiante. Tomar la decisión de renunciar a un empleo porque no ofrece oportunidades de progreso podría ser un buen motivo, pero la mayoría de los tribunales no lo considerará apremiante. El descontento con el empleo tampoco se considera un motivo apremiante para renunciar.
Para poder cobrar el seguro de desempleo, los motivos apremiantes para renunciar a un empleo pueden incluir los siguientes:
Si un empleador deja cesante a un empleado o le reduce significativamente las horas de trabajo, el empleado recibirá las prestaciones de desempleo, siempre y cuando tenga la antigüedad suficiente para ser elegible según el programa estatal.
Los empleados que fueron despedidos pueden reclamar las prestaciones del seguro de desempleo si los motivos por los cuales fueron despedidos no tuvieron que ver con una conducta inadecuada de su parte. Por ejemplo, si un empleado es despedido porque la compañía tenía problemas financieros y tuvo que reducir el tamaño de la fuerza de trabajo, entonces ese empleado tiene derecho a recibir el seguro de desempleo. Un empleado despedido también puede ser elegible para recibir las prestaciones de desempleo si el empleador tuvo un motivo válido para despedirlo, pero las infracciones fueron menores o la conducta inadecuada no fue intencional. En otras palabras, no todas las acciones que tienen como resultado el despido son lo suficientemente graves como para calificar como conducta inadecuada y negar las prestaciones del seguro de desempleo.
Si se aprueba su reclamo de desempleo, comenzará a recibir las prestaciones semanalmente, después de un período de espera de una semana. Es decir que no recibirá prestaciones durante la primera semana de desempleo. Las prestaciones de desempleo normalmente duran 26 semanas, aunque este período puede extenderse cuando la economía está pasando por un mal momento y los empleos escasean.
La oficina que maneja los reclamos de desempleo en cada estado determinará la suma que recibirá por semana, la cual está sujeta a impuestos. Mississippi paga $235, la cantidad semanal mínima, mientras que Massachusetts paga $635 (a julio de 2013), la cantidad máxima.
Si usted es un empleado federal, posiblemente sea elegible para acceder al programa Seguro de desempleo para empleados federales (Unemployment Compensation for Federal Employees, UCFE). Si bien al programa está a cargo del gobierno federal, son las reglamentaciones estatales las encargadas de determinar el monto del reclamo y demás requisitos de elegibilidad. El organismo le preguntará cómo terminó su relación laboral (despido con motivo, cesantía, etc.) y luego se pondrá en contacto con su antiguo empleador para corroborarlo.
Cada estado cuenta con sus propios procedimientos para presentar reclamos por desempleo, aunque son todos bastante similares. La mayoría de los estados permite a los demandantes reclamar las prestaciones de desempleo por teléfono, correo electrónico o en línea. Deberá proporcionar la información personal básica (como el nombre, la dirección, el número del Seguro Social, etc.), así como sus antecedentes laborales.
Si bien existen variaciones según el estado, un reclamo de seguro de desempleo típico se desarrolla de la siguiente manera:
Tienen derecho a recibir las prestaciones del seguro de desempleo los empleados que hayan quedado cesantes, hayan sido despedidos injustificadamente u obligados a renunciar por un motivo apremiante. Si tiene preguntas sobre sus derechos según el sistema de seguro de desempleo de su estado, comuníquese con un abogado especializado en derecho laboral cerca de usted.
Este artículo pretende ser útil e informativo, pero los asuntos legales pueden llegar a ser complicados y estresantes. Un abogado calificado en derecho laboral y de empleo puede atender a sus necesidades legales particulares, explicar la ley y representarlo en la corte. Dé el primer paso ahora y póngase en contacto con un abogado calificado en derecho laboral y de empleo cerca suyo para hablar sobre su situación jurídica particular.