Darryl A. Goldberg

­­­Abogado Darryl A. Goldberg

Colegiaciones:

• Illinois
• Florida
• Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Norte de Illinois
• Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Este de Michigan
• Corte de Apelaciones del Sexto Circuito de los Estados Unidos
• Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Central de Illinois
• Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Oeste de Wisconsin
• Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Este de Wisconsin
• Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Norte de Texas
• Corte de Apelaciones del Séptimo Circuito de los Estados Unidos
• Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Norte de Indiana

Educación:

• Instituto de Tecnología de Illinois, Facultad de Derecho de Chicago-Kent, Chicago, Illinois
  • Doctor en Jurisprudencia
  • Honores: cum laude
• Universidad de Michigan, Ann Arbor, Michigan
  • Honores: James B. Angell Scholar

Afiliaciones y logros profesionales:

• Litigante del Año 2019, Instituto Americano de Abogados Litigantes
• Los 100 Mejores Abogados Litigantes, Abogados Litigantes Nacionales
• Super Lawyers
• Top One Percent, Asociación Nacional de Abogados Distinguidos
• Premio a la Satisfacción del Cliente, Instituto Americano de Abogados Penalistas
• 40 Under 40, Los Mejores Abogados Litigantes Nacionales
• Los Diez Mejores Abogados Menores de 40 Años, Academia Nacional de Abogados de Defensa Penal
• Estrella en Ascenso, Super Lawyers de Illinois
• Colegio de Abogados de Chicago (CBA, por sus siglas en inglés) / Comité de Derecho Penal de la Sección de Abogados Jóvenes (YLS, por sus siglas en inglés), Copresidente
• Colegio de Abogados de los Estados Unidos, Sección de Litigio, Comité de Pruebas de Juicios, Subcomité de Pruebas Penales, Copresidente
• Colegio de Abogados de los Estados Unidos / Comité de Justicia Penal y Juvenil de la División de Abogados Jóvenes (YLD, por sus siglas en inglés), Vicepresidente

Illinois vs. CH

CH fue acusado de ser un delincuente habitual armado, un delito grave de clase X, por presuntamente poseer un arma de fuego después de haber sido condenado previamente por otros dos delitos graves. Cuando CH fue arrestado, estaba en libertad condicional en el estado de Missouri, y si lo declaraban culpable en Illinois, no solo se enfrentaba a décadas de prisión en ese estado, sino que Missouri lo penalizaría también por violar su libertad condicional y cumpliría una pena de prisión más prolongada allá. CH contrató al Sr. Goldberg para que lo representara, a sabiendas de que negociar un acuerdo con la fiscalía no era una opción; CH tenía que ir a juicio y ganar. El Sr. Goldberg investigó a fondo el caso de CH, envió numerosas citaciones, utilizó investigadores profesionales y habló personalmente con testigos potenciales y otras personas con información que podían ayudar al caso de CH. Finalmente, CH fue a juicio y el Sr. Goldberg interrogó a fondo al oficial de policía que lo arrestó y presentó un testigo en defensa del acusado. CH fue declarado «NO CULPABLE» y salió del juzgado como un hombre libre, quitándose un gran peso de encima.

Illinois vs. GC

GC fue acusado de posesión con la intención de distribuir cannabis (marihuana), después de que la policía del alguacil del condado de Cook y los oficiales de policía de Skokie fueron al apartamento de GC para arrestarlo por un delito menor. Cuando los agentes arrestaron a GC, registraron su apartamento y encontraron cantidades ilegales de marihuana y parafernalia de drogas, incluida una balanza. GC no estaba contento con su primer abogado, por lo que contrató al Sr. Goldberg para que lo defendiera. El Sr. Goldberg sintió que los oficiales habían violado los derechos constitucionales de GC, por lo que presentó una moción para suprimir evidencias y declaraciones, argumentando que los agentes de la ley habían registrado ilegalmente el apartamento de GC, incluido el uso ilegal de un K9 (perro detector de drogas), así como también habían interrogado ilegalmente a GC cuando fallaron en leerle sus derechosMiranda después de ser arrestado. El Sr. Goldberg condujo una audiencia probatoria para presentar la moción de supresión. El juez estuvo de acuerdo con el Sr. Goldberg y concedió la moción, excluyendo todas las evidencias, incluida la marihuana, la parafernalia y las declaraciones de GC a la policía. El caso de GC fue desestimado.

Illinois vs. FC

FC estaba celebrando la victoria de los Chicago Bears y bebiendo cerveza con algunos amigos. Desafortunadamente, FC tomó la decisión de conducir, quitándole la vida a un hombre e hiriendo de gravedad a la esposa y la hija del mismo. El nivel de alcohol en sangre de FC era más de 3 veces el límite legal y fue acusado de una variedad de delitos graves agravados por conducir bajo los efectos del alcohol. FC contrató al Sr. Goldberg y a su colega para defenderlo. La evidencia de la culpabilidad de FC era abrumadora y se declaró culpable «sin previo acuerdo» de un cargo de conducir bajo los efectos del alcohol Clase 2, enfrentando 14 años de prisión. Sin embargo, el Sr. Goldberg y su colega llamaron a numerosos testigos en la audiencia de sentencia y le dieron al juez suficientes «razones para mitigar la pena», destacando la vida ejemplar de FC, a pesar de este trágico error. Después de una audiencia de sentencia cargada de emociones, el juez coincidió con el Sr. Goldberg en que existían «circunstancias extraordinarias» y que se haría justicia si FC era sentenciado a libertad condicional. Si FC logra completar con éxito su libertad condicional, no pasará una noche en la cárcel.

Illinois vs. JP

JP fue acusado de asesinato en primer grado en un caso llamado Shaken Baby Murder. JP era el tío y cuidador de un bebé que murió, según los fiscales del condado de McHenry, como resultado de haber sido sacudido violentamente. JP se enfrentaba potencialmente la pena de muerte (cuando fue autorizada en Illinois) y, tras ser declarado culpable de los cargos, habría enfrentado décadas de prisión, que se traducían en cadena perpetua para él. Después de años de una investigación exhaustiva, así como una revisión e informe de un testigo experto, el Sr. Goldberg y sus colegas pudieron convencer al fiscal de que redujera drásticamente los cargos de asesinato en primer grado a un cargo de homicidio involuntario donde JP podía (y sería) condenado a libertad condicional, evitando cualquier tiempo en prisión, o incluso la cárcel. En la audiencia de sentencia, la fiscalía luchó por una pena de 5 años en prisión, pero el Sr. Goldberg convenció al juez de que condenara a JP a un período de libertad condicional sin tiempo en la cárcel.

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