Ciudadanos de los Estados Unidos, por nacimiento o naturalizados, y residentes permanentes pueden ayudar a sus familiares más cercanos para que obtengan la tarjeta de residencia permanente. Este proceso se conoce como reunificación familiar.
Esta es la manera más común de inmigrar a los Estados Unidos, a través de una petición que haga un familiar directo o pariente, autorizado por las leyes de inmigración.
El sistema de inmigración de los Estados Unidos utiliza un sistema de preferencias para poder elegir cuáles parentescos pueden emigrar y en qué orden. Por lo tanto, mientras más temprano solicite a su pariente más rápido obtendrá su residencia, si cumple con los requisitos.
A continuación, le presentamos un resumen con los pasos para ayudar a un familiar a inmigrar a los EE. UU. y cómo funciona el sistema de preferencias por parentesco.
Depende de si el solicitante es un ciudadano o un residente permanente legal, y del tipo de vínculo familiar.
Ciudadanos estadounidenses (por nacimiento o naturalizados): pueden pedir a sus familiares directos para que vivan y trabajen en los Estados Unidos, con la opción de convertirse en residentes permanentes.
Los siguientes vínculos familiares inmediatos tienen una visa de inmigrante disponible de inmediato, significa que no hay tiempo de espera y el proceso de inmigración es más corto y sencillo:
Los siguientes parentescos también califican para la tarjeta de residencia (green card). Pero estos familiares deben esperar hasta que haya una visa de inmigrante disponible para ellos:
Residentes permanentes de los Estados Unidos: pueden presentar una petición para traer a sus parientes a vivir a los Estados Unidos, y con los mismos derechos para obtener la residencia permanente. Pero, quizá tengan que esperar un poco más, ya que el orden de categoría preferencial basado en la relación familiar es diferente.
Recurrir al beneficio de la reunificación familiar es la manera más fácil para reencontrarse con su familia en los Estados Unidos, aunque el proceso de solicitud para un pariente pueda consumir mucho tiempo y no se garantiza que sea exitoso.
Pero un abogado de inmigración le puede ayudar a comprender las leyes de inmigración que rigen el proceso de solicitud de familiares. Y, además, un abogado conoce cuál es la vía más corta y efectiva según el vínculo familiar.
El número de disponibilidad de las visas de inmigrante también depende del país de origen de su familiar. Algunos países tienen un volumen más alto de personas que desean emigrar que otros, y esto también determina el orden en el cual será procesada su visa de inmigrante.
Para tener una idea de los tiempos del proceso le conviene consultar como avanzan las categorías en el boletín de visas o en la página de USCIS.
Si su pariente está fuera de los Estados Unidos no podrá venir al país como inmigrante hasta que tenga su visa. De hecho, si su familiar se encuentra en los EE. UU. pero no tiene un estatus legal, existe la posibilidad de que pueda tener problemas para obtener una visa de inmigrante.
En algunos casos, se le pide que salga del país y vuelva. Si esta es su situación un abogado de inmigración le puede asesorar con esta petición.
En este momento usted también tendrá que presentar una declaración jurada donde se compromete al sostenimiento de su pariente. Sin un patrocinador financiero, su familiar no puede inmigrar a los EE. UU.
Si la persona que está patrocinando ya se encuentra en los Estados Unidos, entonces tendrá que realizar un ajuste de estatus para residente permanente.
Esto es una buena noticia. Si usted inicia un proceso de petición de pariente siendo un residente permanente, pero durante la espera obtiene la ciudadanía estadounidense, entonces su familiar pasará a otra categoría de preferencia.
Usted debe notificar este cambio inmediatamente al Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos o al Centro Nacional de Visas, de acuerdo con la etapa que guarde el proceso de la solicitud.
Ahora, que el patrocinador es un ciudadano de los EE. UU., su cónyuge y cualquiera de sus hijos solteros menores de 21 años, automáticamente serán elegibles para inmigrar y obtener su tarjeta verde, sin necesidad de sujetarse a un período de espera de número de visa.
Sin embargo, los hijos mayores de 21 años probablemente tendrán que esperar a dicho período.
Este artículo pretende ser útil e informativo, pero los asuntos legales pueden llegar a ser complicados y estresantes. Un abogado calificado en inmigración puede atender a sus necesidades legales particulares, explicar la ley y representarlo en la corte. Dé el primer paso ahora y póngase en contacto con un abogado calificado en inmigración cerca suyo para hablar sobre su situación jurídica particular.